martes, 25 de noviembre de 2008

Editorial Diciembre 2008.



Diciembre es el mes más bonito del año, donde se mezclan varios sentimientos, nostalgia, melancolía, alegría, tristeza, felicidad, esperanza y fe, abundan las fiestas, las posadas, los convivios, las reuniones de generación, cualquier pretexto es bueno para reunirse con la familia, los amigos, los compañeros de trabajo, etc.

No sé si influya el clima frío, las calles y las casas llenas de luces de colores, los miles de árboles de navidad que abundan en los centros comerciales y los anuncios en todos los medios de comunicación que nos incitan a las compras navideñas, pero a todas las personas les cambia el semblante, por unos días nos volvemos más amables, más respetuosos, más cándidos, más bondadosos, ¿más felices?

Me encanta la época navideña, pero me gustaría que todos los días fueran Navidad y no por las cosas materiales, no por esperar algún regalo, no se necesita un día específico para demostrar cariño, amor, amistad; me gustaría que todos los días fueran Navidad, porque todos nos sentimos bien con nosotros mismos, con nuestra familia y hasta con los vecinos.

No esperemos que llegue Navidad para sentirnos felices y regalar amor, vivamos el espíritu de la Navidad día con día y valorar que podemos compartir tiempo con nuestra familia y seres queridos. Haz que estas fechas sean realmente prósperas para ti y tu familia. Vive una Navidad diferente: inteligente y financieramente sana.


A todos nuestros lectores les deseamos paz, salud y muchas bendiciones. ¡Feliz Navidad y prospero Año Nuevo!

martes, 18 de noviembre de 2008

Menú de Navidad

Evangelina RICÁRDEZ*

Ya empezamos con los preparativos para navidad y, por supuesto el menú para ese día especial debe ser fácil de preparar con magnífica presentación y además económico, les preparé esta propuesta, espero sea de su agrado. Tendremos como entrada un risotto mezclado en esta ocasión con verduras.

Después un filete de lenguado servido con una guarnición de juliana de zanahorias y como final una reducción de vino blanco, y de postre una mousse de fresa, que es un fruto de temporada (estas recetas las puede encontrar en la edición impresa de la Revista mujeres edición de diciembre).

¡Feliz Navidad a todos y que Dios nos conceda el inicio del año 2009 con salud primordialmente y rodeados de nuestros seres queridos!

¡Felicidades y salud!


Risotto Verde.
Ingredientes:

1 taza de calabacitas cortadas en cubos.
1 taza de flores de calabaza rebanadas.
1 taza de chiles poblanos cortados en cubos.
1 taza de chicharos chiños (chauchas) rebanados.
½ taza de epazote fileteado.
½ taza de albahaca fileteada.
½ taza de perejil picado.
½ taza de piñones.
1 taza de parmesano rallado.
1 taza de crema espesa.
1 caja de arroz para risotto (arborio).
150 gramos de mantequilla.
1 litro de caldo de pollo.
¼ de taza de chalotas picadas.
1 taza de vino blanco.


Preparación:

En una cacerola se fríe las chalotas y hasta que doren ligero, agrege el arroz y fríe por 5 minutos más, añadir el vino, mezclar y dejar evaporar el alcohol, luego añadir 1 taza del caldo de pollo y dejar evaporar ¾ partes y añadir una taza más dejando evaporar casi totalmente y repetimos hasta terminar el caldo y que el arroz esté al dente.
Aparte en una sartén antiadherente fríe las calabacitas, el chile poblano y los chicharos chiños, por unos minutos y agregar al risotto al mismo tiempo las hierbas, el queso, los piñones y la flor de calabaza, crema mezclamos todo muy bien, rectificamos la sazón con sal y pimienta.

Servir caliente.

¡Buen provecho!



*Jubilada del IMSS como Histotécnologa después de 30 años de servicio, socia del club Soroptimista Internacional Oaxaca desde hace 6 años y fue presidenta durante el período 2007-2008, ahora es funcionaria de la región México-Centroamérica como Coordinadora del programa Somos Factor Cambio para la Mujer. Para más recetas evange52@hotmail.com

La revolución de los pijos. El contexto.

César MENDOZA*

Festejamos y criticamos lo ocurrido durante la “marcha iluminemos Oaxaca”. Lo que a continuación se podrá leer son ideas que giran entorno a preguntas como ¿Qué oportunidades tiene para sobrevivir y realizarse un movimiento con varias organizaciones si se quiere, que encamine sus objetivos hacia la democracia? ¿Qué amenaza a dichas organizaciones y a dicho movimiento hacia la democracia?
La cuestión de lo consecuente.
El escenario parece favorable para una posición intermedia, donde los extremos van, por una punta, desde las corporaciones y organizaciones afines al Estado, el corporativismo; hasta la otra punta, pasando por las organizaciones y movimientos sociales que -es muy cierto- se oponen al Estado pero no muestran señales claras sobre un ideal “democrático” que implique la formación de un Estado de Derecho y la construcción de instituciones desde la ciudadanía. El punto es que el Estado como la oposición no partidista, no ha mostrado un discurso democrático y “el querer” acercarse a una democracia participativa, entendiendo que para esta, se necesita la construcción de instituciones que permitan primero, legalizar la participación; segundo, protejan a la participación de la cooptación e infiltración del Estado autoritario. En ese panorama que nos muestra la lucha política en Oaxaca, hay que agregar un punto trascendental que nos permite observar los objetivos de los extremos. Lo Estatal y no estatal, o los movimientos verticales, buscan el poder. Por un lado, el primero, el mantenimiento del poder dentro de los grupos que actualmente ostenta el gobierno; por el otro lado, el segundo, busca la llegada al poder. Los dos se mueven bajo el encuentro de “buenos/malos” que entroniza al caudillo - líder como salvador de la masa, del cuerpo homogéneo que son tanto el corporativismo y el verticalismo de los movimientos. Se puede aceptar heterogeneidad al interior pero no al exterior de los extremos. La oportunidad del germen de organizaciones de individuos que han aparecido a la luz pública enarbolando la bandera de la seguridad, así como el respeto a la cultura, se presenta como una tercera opción para buscar la organización de los individuos en espacios públicos que le permitan generar una “agenda pública” de demandas que no hayan sido recogidas por los extremos existentes. Por otra parte, el discurso que ha aparecido en los “marchistas”, aquellos que se unieron a las caminatas”, aunque débil y todavía demasiado general, no ha mostrado un interés directo por la llegada al “poder” y la obtención de puestos de elección popular. Lo que ha mostrado es querer influir en el poder político para que la agenda política cambie e incluya las demandas ciudadanas. Además, este discurso se suma al proceso de pérdida de “legitimidad” que viven tanto los actores políticos como el propio régimen de gobierno. La pérdida de legitimidad que han provocado los “marchistas”, se debe a que son un sector que no se había manifestado y, que durante el movimiento del 2006 marcó una postura de desinterés a lo que pasaba, descalificó a los actores del conflicto o simplemente buscó una salida que favoreciera al Estado. Si bien en el 2006, los caminantes andaban por su propia acera, la actualidad ha demostrado que hoy la individualidad ha dado paso a una colectividad que no niega sus coincidencias, la oportunidad radica en tratar de entablar coincidencias con aquellos sujetos que no se han identificado con el corporativismo estatal y los movimientos que aspiran a llegar por medio de sus caudillos al poder. El punto que tienen que demostrar es una continuidad en su actuar, no sólo ser una cuestión pública esporádica; la cuestión es lo consecuente que debe llegar a ser.
La desarticulación de lo vertical.
La amenaza que enfrentan las “nuevas” organizaciones que han surgido en este año, también provienen de los extremos y se mueven entorno a la aceptación que estas puedan tener en el imaginario social y en el discurso que el Estado tenga hacia ellas. Primero, el imaginario social en Oaxaca está lleno de formas de manifestaciones públicas que se confrontan contra el Estado y aquellas que depende de el. Las primeras, van dirigidas a la conquista del poder o al menos a la adquisición de puestos dentro del poder; la lógica, es la llegada al poder para de allí ayudar a los desprotegidos. El Estado, al sentir la amenaza de estas organizaciones en los sectores que con su apatía o muestras de simpatía seguían legitimando su actuar, buscará descalificar el discurso que estos han mostrado. La amenaza más grave que pueden enfrentar las organizaciones por parte del Estado es la desmovilización. Esta se puede dar por medio de concesiones que el gobierno de a sus demandas quitándoles así, el protagonismo a las organizaciones en la implementación de políticas. Por otra parte, la aplicación de políticas que promueva la participación de los líderes de estas organizaciones al interior de la burocracia, esto conducirá a una falta de confianza por parte de todos aquellos que apoyan o pensaban apoyar a las nuevas organizaciones. Si va a ver un diálogo entre las nuevas organizaciones y el Estado, debe ser desde los lugares a los que se pertenece. No se trata de que las organizaciones se vuelvan trabajadoras del Estado ni clientes del Estado. Se trata de que las organizaciones creen y trabajen sus propuestas desde el interior de las organizaciones o en los espacios públicos no estatales y en una franca comunicación con el gobierno expongan sus conclusiones y propuestas pero, que después de esto, no abandonen sus organizaciones para volverse parte del aparato burocrático del Estado, sino que se generen políticas que permitan seguir trabajando desde las organizaciones y, al mismo tiempo, colaborando con la transformación del Estado en un sistema democrático. La tarea de las nuevas organizaciones es desarticular la verticalidad.


* Politólogo por la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla, colabora con diversos medios de comunicación como articulista y analista político. cesar_991@axtel.net, cesar_991@hotmail.com